"Lo que importa verdaderamente en la vida no son los objetivos que nos marcamos, sino los caminos que seguimos para lograrlo"

miércoles, 28 de noviembre de 2012

Rapport


Rapport es el  proceso mediante el cual se establece una relación de armonía, entendimiento y confianza mutua  con otra persona. Es establecer por parte del entrevistador, una adecuada relación o comunicación con el entrevistado que le permite sentirse cómodo y reducir su tensión, mas aun si el entrevistado ansia obtener el trabajo al que postula. Dicho de otro modo, es la relación de sintonía que establecen las personas cuando se relacionan, y aquí nos encontramos la agudeza sensorial como uno de los elementos más importantes. Para ello se requiere estar muy pendientes del otro y ser sensibles a la información que emite siendo nosotros también importantes en esa información.

Lo podemos observar cuando vemos a dos personas conversar agradablemente. Si nos fijamos sus movimientos serán sincronizados, gesticulan del mismo modo, tienen el mismo tono de voz, pero no ocurre lo mismo cuando vemos a dos personas discutiendo, su comunicación no verbal es completamente distinta.

En mis palabras, el Rapport busca la sintonía, la conexión con la otra persona a través de la comunicación verbal y no verbal (para conectar con él). Es:
  • Igualar el lenguaje (equilibrar mi nivel cultural, vocabulario...), es adaptarse a la otra persona.
  • No sólo adaptar el vocabulario y el nivel cultural, también los gestos, la respiración...
Si al cabo de un rato cambio la postura y el otro hace lo mismo, entonces he conseguido estar en "Rapport". Es igualar los gestos para hacerme con la otra persona y así se va abriendo poco a poco porque le estoy transmitiendo que le escucho y que le entiendo. De ahí la importancia de saber dominar un buen Rapport en nuestra vida en general.

A continuación muestro un vídeo donde queda reflejado a la perfección en qué consiste esta técnica.



 Un saludo y buenas tardes lectores

jueves, 22 de noviembre de 2012

Te escucho atentamente


LA ESCUCHA ACTIVA

La escucha activa es la técnica más potente en orientación.

Es entender lo que el otro me está diciendo verbal y corporalmente y hacerle ver que le estoy escuchando a través de la comunicación no verbal. Para ello usamos reformulaciones (“si no te he entendido mal”, “lo que me estás diciendo si no me equivoco es…”), miramos a la persona que demanda nuestra orientación personal, la acompañamos emocionalmente, asintiendo, mediante el Rapport (más adelante hablaré sobre qué es el Rapport).

Pero para que se dé bien la escucha activa debemos de ser conscientes como orientadores de que no podemos escuchar a alguien si estamos cansados, si no nos interesa el otro, si no nos interesa lo que nos está contando (esto nos puede ocurrir cuando trabajamos con adolescentes), si le juzgamos por lo que ocurre o si en ese preciso momento quienes necesitan ser escuchados somos nosotros y no ellos debido a alguna preocupación que nos abruma.

No podemos pasar tampoco por alto que la escucha más efectiva se hace SIEMPRE desde el corazón. Por más posturas, técnicas y estrategias que ensayemos y utilicemos, si detrás no está nuestra comprensión por el otro, la escucha no funciona.

Por encima de todo, ¡SÉ TÚ MISMO CUANDO ESCUCHES!

Debemos buscar herramientas que nos hagan sentir a gusto, porque es muy importante ser auténticos, adoptando herramientas como las siguientes a nosotros mismos.


TÉCNICAS O HERRAMIENTAS PARA LA ESCUCHA ACTIVA

  • Refuerzo Positivo: animar a nuestro interlocutor a que siga hablando con expresiones del tipo: “si”, “ya”, “entiendo”, “¿y después?”, etc. Es animarlo a sacar todo lo que tiene, metafóricamente hablando, en el cajón.
  • Resumir: para ello se necesita entender lo que nos ha dicho, seleccionar los elementos clave, de forma clara y directa y mostrando empatía: “si no te he entendido mal…”, “a ver si te he entendido bien…”.
  • Reformulación: aquí le decimos lo que él nos ha transmitido pero con nuestras palabras. Esta herramienta es más difícil porque como bien sabemos, las palabras tienes más de un significado.
  • Asentir: asentir levemente con la cabeza, pero tener cuidado con la frecuencia de asentir porque puede parecer que no le estamos escuchando activamente y que nos aburre lo que nos está contando.
  • Reflejar: es la escucha activa en su sentido estricto. Quizá sea la técnica más completa bajo mi punto de vista. Se trata de decir con mis propias palabras los sentimientos existentes bajo lo que el otro ha expresado.

Las técnicas de escucha activa, por tanto, a priori son muy sencillas pero resultan ser muy complejas: son pequeñas grandes cosas.

jueves, 15 de noviembre de 2012

La rueda de la vida I

Al hablar de competencias, debemos tener en cuenta los siguientes criterios:
  1. SABER            
  2. QUERER
  3. HACER
Pero, ¿qué significan estos tres conceptos? Saber es conocer con mayor exactitud; querer es la actitud proactiva por seguir aprendiendo y ponerlo en práctica; y hacer es llevarlo a la práctica, es la acción.
Esto hay que trabajarlo con los usuarios pero también nos lo tenemos que aplicar a nosotros mismos como orientadores. Nos encontraremos casos en los que el cliente sabe pero no quiere, o en casos en los que no sabe pero quiere, y de está forma se va a quedar cojo. Sea como sea y sea quien sea, hay que trabajar todas las competencias en unos niveles y en otros.

Personalmente, considero que me encuentro en una situación en la que sé mucho, en la que quiero, pero en la que no he hecho. Así que tendré que centrarme en trabajar la competencia de hacer.

Para consolidar esto de las competencias, haremos una reflexión sincera y honesta sobre nuestro nivel de competencias para saber en qué competencias estamos más fuertes y en cuáles nos tenemos que poner en práctica. Esta actividad es conocida por el nombre de: LA RUEDA DE LA VIDA.
La rueda de la vida es una representación gráfica de cómo valoras tu situación en las diferentes parcelas de tu vida. Está centrada en la pregunta para que la persona sea consciente de qué aspecto de su vida quiere trabajar, para que reflexione. Nosotros como orientadores:
  • Podemos entregar a la persona un folio con una rueda dibujada, o incluso una rueda pintada con tiza en el suelo.
  • La rueda se divide, a nivel teórico, en 8 quesitos (pero también puede ser en 6, en 4… según lo que queramos trabajar), y en cada uno se escriben las áreas más importantes de la vida de una persona: dinero, familia, pareja, amigos, ocio, crecimiento personal, entorno, profesión…
  • Le decimos a la persona que en la situación actual que está viviendo vaya puntuando de 0 a 10 su nivel de satisfacción en cada una de esas áreas.
  • A continuación le pedimos que una la puntuación, y le preguntamos:
-          ¿Qué es lo que ves?
-          ¿Qué te dice tu rueda?
-          ¿Qué es para ti la empatía?, ¿y la profesionalidad? (por ejemplo)
-          ¿A nivel emocional cómo te sientes en cada una de las diferentes áreas?
-          ¿Cuál es tu nivel de satisfacción en cada una de ellas?, ¿qué límites tienes?
-          ¿En cuál de estas áreas harías un cambio si sabes que dicho cambio afectaría al resto de las áreas? Lo que responda a esta pregunta me servirá de clave porque significará que, si trabaja esa área en concreto, mejorará. Es el llamado “punto palanca”.

Independientemente de si uso una plantilla u otra, tengo que preguntarle al cliente qué significan para él cada área. Con esto se logra una toma de conciencia de lo que está pasando e identificamos aquella área o aspecto que quiero trabajar.

Se trata de algo simbólico, flexible y visual que permite a la persona, a través de la pregunta, tomar conciencia de dónde está. Es como si le diéramos un mapa y una brújula para que de esta forma encuentre su posición respecto a un mapa. Es importante también destacar que no hay respuestas buenas ni malas, sólo se trata de que el cliente reflexione.

A través de las preguntas anteriormente formuladas, podremos ver en qué medida esas competencias influyen positivamente en el resto de competencias. Además, a través de las mismas, el usuario obtendrá varios objetivos (pero siempre pocos, uno o dos) (¿qué quieres conseguir?) con los que habrá que trabajar para poder mejorar (¿qué acciones concretas crees que tienes que hacer para lograr cada uno de los objetivos?, ¿cómo vas a hacer para evitar hacer lo que no quieres hacer?, ¿qué necesitas tú para conseguir esos objetivos?). Necesito que seleccione acciones concretas para que lo ponga en práctica, para que haga un PLAN DE ACCIÓN.
En dicho plan de acción deberá decir en qué áreas ha tenido dificultades, en cuáles no, y luego trabajar los momentos de revisión y de autoevaluación, y para ello podemos hacer una fotografía a la rueda de la vida establecida en esta primera sesión para así compararla con la siguiente que realice.



lunes, 12 de noviembre de 2012

Sillas perceptivas



La técnica de las "Sillas Perceptivas" o "Posiciones Perceptivas" es una técnica para trabajar la empatía, pero no para que nosotros como orientadores seamos empáticos con el usuario sino para que el usuario sea empático con la situación que está viviendo. Puede ser trabajada en una única sesión. Se pueden hacer tantas posiciones como creamos oportuno. Se trata de una técnica muy potente para la resolución de conflictos, y es muy efectiva para tratar temas familiares. Puede ser trabajada desde los 5 años hasta la vejez, por lo que es una técnica muy eficaz.

La base de la técnica es la siguiente:
  • El espacio: el cambiarse de lugar ayuda a ponerse en el lugar del otro
  • La pregunta

Los pasos o dinámica a seguir es la siguiente:
  1. Postura desde sí mismo. Que uno hable desde sí mismo, que hable de su problema y de cómo ese problema le hace sentir. Para ello se le pueden hacer al usuario preguntas del tipo: ¿qué has hecho hasta ahora para solucionarlo?, ¿qué crees que puedes hacer? No vale que te diga que algo le hace sentir mal, sino ¿qué es para él sentirse mal?, ¿Qué está pasando? Sería conveniente y positivo que expresara alguna emoción.
  2. Postura desde la otra persona con la cual se tiene o se cree que se tiene el problema. Aquí es donde habitualmente más tiempo se está porque es la parte más complicada. En esta fase se pueden hacer preguntas tipo: ¿qué te gusta hacer? (desde el punto de vista del otro), ¿a qué cosas le das más importancia?, ¿qué significa para él esa situación?, ¿cómo lo ves tú?, ¿qué solución propondrías tu?
  3. Postura desde una persona ajena a la situación. ¿Alguien desde fuera qué ve?, ¿qué sensación y emoción le produce esta situación que está viendo desde fuera?, ¿qué propuesta le harías a la persona que cree que tiene el problema?, ¿y qué propuesta le harías a la persona con la que se tiene el problema?, ¿qué les dirías? ¿qué crees que les puede ayudar? Lo realmente bueno sería intentar que las propuestas vayan dirigidas a la persona con la que trabajamos porque es realmente ella quien puede hacer cambios. Si el observador fuera, por ejemplo, un niño de 5 años, la situación sería muy interesante ya que lo más probable sería que no entendiera nada de lo que está ocurriendo. Con la figura del niño como observador, se obtiene mucha información sobre la comunicación no verbal (el niño seguramente diría: “gritan, no sonríen, etc”).
  4. Postura de personas a las que se admire. Ésta sea quizá la postura más difícil ya que cuando hay valores por medio como pueden ser la amistad, el amor, el cariño o mismamente la simpatía, es más difícil ver de forma objetiva la situación problema. Se trataría de preguntarle si tiene una persona a la que admire, a la que para él su criterio sea importante (indicarle que puede ser alguien imaginario, o incluso un famoso, da igual).
La cuestión es que el sujeto lo vea desde diferentes puntos de vista y, sobretodo, que pueda ponerse en el lugar del otro, esto es: aprender a ver el conflicto de otra manera. De esta forma será él mismo con sus propios recursos el que pondrá una solución siendo nosotros meros ayudantes en su andadura hacia ese objetivo.

Competencias de un buen orientador


En mi opinión, las características de un buen orientador son las siguientes:

Þ     Empatía

Þ     Escucha activa

Þ     Respeto por uno mismo y por el otro

Þ     Responsabilidad como sentido de compromiso y como sentido de dar respuestas.

Þ     Profesionalidad.

Þ     Cooperación con el equipo y con la comunidad, con las redes. Debemos tener información de los diferentes recursos que hay por la zona.

Þ     Capacidad de reciclarse.

Þ     Autoconocimiento y autoevaluación: pensamiento de mejora.

Þ     Confianza

Þ     Estar libre de prejuicios

Þ     Gestión emocional

sábado, 10 de noviembre de 2012

Honestidad sinónimo de Orientación


Como orientadores, ¿seremos siempre buenos profesionales?
Como Orientadores que somos, vamos a estar ante diferentes situaciones. Estas situaciones pueden tratar temas con los que no empaticemos del todo, por no decir nada. En este caso, ¿cómo deberíamos actuar?, ¿llevaríamos el caso adelante?, ¿seríamos capaces de orientar a una persona con la que cuya forma de actuar no empaticemos?
Soy consciente de que muchas personas contestarán que no a estas preguntas, y quizá me incluya yo. Otras sí se verán capaces de afrontar esta situación. Pero… si lo pensamos bien, ¿realmente ayudaríamos en el proceso de orientación a una persona que haya abusado (y me da igual el tipo de abuso: sexual, verbal, físico o psíquico) de otra persona?, ¿trabajaríamos con una familia que ha acaba de sufrir la pérdida de un ser muy querido si por ejemplo alguno de nosotros como orientadores hubiera también sufrido recientemente otra pérdida?, ¿sacaríamos fuerzas? No se trata de sacar fuerzas ni de armarse de valor. Un orientador NO ES UN SUPERHÉROE. Ante todo, los orientadores somos personas y no somos ningún Dios que tenga la solución a todos los problemas. Y el hecho de que no podamos trabajar determinadas situaciones, no quiere decir que no seamos buenos profesionales, en absoluto.
Está claro que ante cualquier dificultad no hay que decir “no”, ahora bien, existen algunas situaciones que no podremos llevar a cabo debido a creencias, a la experiencia o a cualquier otro motivo. Debemos ser conscientes de ello y sobretodo, DEBEMOS SER HONESTOS CON NOSOTROS MISMOS.

Cuando somos grandes en humildad, estamos más cerca de lo grande


jueves, 8 de noviembre de 2012

Conocerse a sí mismo



El objetivo de este ejercicio es lograr un mejor conocimiento de mí misma en relación  la actividad profesional de orientador.
 
Como ya hemos indicado, es importante que los orientadores en formación sean conscientes de sus propios pensamientos, sentimientos, reacciones y prejuicios. A continuación presentamos una lista de situaciones que podrían llevar a un cliente al despacho de un orientador. Léela e identifica aquellos problemas que:

  • Te hagan sentir incómodo.
  • Te parezcan difíciles.
  • Te parezcan muy difíciles.

Recuerda que no tienes que decir cómo orientarías a los clientes ante esos problemas. Tampoco tienes que pensar en posibles respuestas o soluciones para ellos.

  1. Una mujer de cuarenta y cinco años dice que le han pillado robando en una tienda. Ya había hecho eso en varias ocasiones pero se siente incapaz de dominarse. ME PARECE DIFÍCIL
  2. Una madre joven dice que ha pegado algunas veces a su hijo de dos años porque llora mucho y no quiere comer.
  3. Un hombre de mediana edad no puede comprender por qué su mujer está tan dolida después de la aventura que tuvo últimamente. Para él no significó nada, pero ella no acaba de entenderlo. ME PARECE MUY DIFÍCIL
  4. Un joven homosexual dice que se siente muy solo y que practica el sexo con cualquiera. Le da igual el tema del SIDA. Lo único que quiere es pasarlo bien. ME PARECE MUY DIFÍCIL
  5. Una mujer dice que desea abortar porque no había planificado su actual embarazo. ME PARECE MUY DIFÍCIL
  6. Una adolescente dice que consume drogas los fines de semana y ve esto como una forma de relajarse con sus amigos. ME PARECE MUY DIFÍCIL
  7. Un señor mayor dice que en el pasado abusó sexualmente de su hija. Ella está recibiendo ahora tratamiento contra la depresión. ME HACE SENTIR INCÓMODA
  8. Una mujer dice que su marido ha estado bebiendo en exceso durante muchos años. A ella le gustaría dejarle, pero no se atreve a tomar la decisión. ME PARECE DIFÍCIL
  9. Una estudiante adolescente dice que ella y otras amigas se han estado metiendo con otra chica de clase. Según ella se lo merecía por “pija”. ME PARECE DIFÍCIL
  10. Un chico de veinticinco años padece depresión y ha pensado bastantes veces en suicidarse. Dice que su vida no tiene sentido. ME PARECE MUY DIFÍCIL
  11. Un joven hace comentarios racistas sobre personas pertenecientes a grupos minoritarios. ME PARECE MUY DIFÍCIL
  12. Un señor mayor dice que las mujeres se pasan la vida quejándose. Para él deberían quedarse en casa cuidando de su familia. ME HACE SENTIR INCÓMODO
  13. Un hombre dice que ha maltratado a su familia. ME HACE SENTIR INCÓMODA
  14. Una mujer pretende convertir a todo el mundo a sus propias creencias religiosas. Está convencida de que esa es su misión en la vida. ME PARECE MUY DIFÍCIL
  15. Un hombre detenido por conducir ebrio dice que lo único es que fue una mala suerte que lo sorprendieran. ME PARECE MUY DIFÍCIL
  16. Una mujer que trabaja en un empleo muy absorbente y estresante dice que tiene dificultades en encontrar tiempo de calidad para dedicárselo a sus hijos.
  17. Un hombre  que trabaja en un empleo muy absorbente y estresante dice que tiene dificultades en encontrar tiempo de calidad para dedicárselo a sus hijos.
  18. Una mujer joven dice que no ve nada malo en tener relaciones sexuales con sus compañeros de trabajo. ME PARECE DIFÍCIL
  19. Un hombre de mediana edad dice que todavía le acepta dinero a su anciana madre, aún cuando sabe de sobra que ella está tratando de comprar su cariño. ME PARECE DIFÍCIL
 
Identifica cada situación según el grado de dificultad que tiene para ti.

ME PARECEN DIFÍCILES: en algunos de los problemas señalados he puesto que me parecen difíciles porque, aunque tengo la seguridad en mí misma de que podría afrontarlos y trabajarlos sin problemas, considero que el camino a recorrer para ello es arduo y difícil. El tema de los divorcios, de la intimidación hacia un alumno/a en las aulas, el soborno, etc., son temas muy complicados que hay que trabajar.
ME PARECEN MUY DIFÍCILES: en algunos de los problemas señalados he puesto que me parecen muy difíciles ya que en muchos casos no empatizo con el cliente y considero que eso es algo fundamental (si por ejemplo uno de mis valores es la fidelidad y la confianza en la pareja, no podría trabajar con alguien que haya sido infiel en su matrimonio y que no le parezca que sea tan grave lo que ha hecho). En otros casos, se trata de temas muy complicados como por ejemplo el aborto, el tema de las drogas, las relaciones sexuales olvidando las enfermedades de transmisión sexual, los pensamientos suicidas, el alcohol y el racismo, con los cuales considero que me costaría mucho trabajar.
ME HACEN SENTIR INCÓMODA: en algunos de los problemas señalados he puesto que me hacen sentir incómoda por los mismos motivos que los que he catalogado como “muy difíciles”: no empatizo en absoluto con las personas que cometen abusos sexuales, que maltratan o que considera a la mujer como un ser inferior al hombre.
 
Ahora, elabora una lista con los temas que te resultaría difícil tratar con otras personas. Después, reflexiona: ¿Qué tienen en común estas situaciones?, ¿Por qué crees que te resultan difíciles?, ¿Hay alguna que te resulte especialmente incómoda?, ¿Por qué?
    - Abusos sexuales tanto dentro del ámbito familiar como de fuera
   - El tema del maltrato a todo tipo de personas pero sobre todo el maltrato infantil.
   - La falta de sinceridad y fidelidad en la pareja y/o matrimonio derivada en infidelidades.
Me resultan difíciles porque no siento empatía por ellas y porque no me veo preparada para afrontar situaciones de este tipo: primero por mí misma y mis valores, y en segundo lugar, por la falta de recursos que considero que tengo para afrontarlas.
Me resultan especialmente incómodas el tema de abuso sexual y maltrato dentro del hogar porque es algo que se me escapa de las manos y que por mucho que le busque una explicación, no la encuentro ni la encontraré jamás.

lunes, 5 de noviembre de 2012

¿Orientación Personal?


Tratar de definir qué es la Orientación Personal puede llegar a ser un tanto complicado. De entre muchas definiciones aportadas por numerosísimos autores como C. Rogers, V. García Hoz, Rodríguez, Bisquerra & Álvarez, Tyler, etc. me he quedado, a nivel personal, con los siguientes aspectos importantes:


Relación estructurada y permisiva
Proceso de ayuda CONTINUA a TODAS las personas
Conocimiento de sí mismo y del mundo
Enseñanza de las técnicas y aptitudes interpersonales
Resolución de problemas
Toma de decisiones
Guiar, conducir, indicar de manera procesual

EL siguiente mapa conceptual refleja lo que es la Orientación Personal para mí: